La última sesión del Curso de Formación Permanente 2017-18 se abrió en la Facultad de Teología San Vicente Ferrer de Valencia con una conferencia a cargo de Dario Vitali, Director del departamento de Teología Dogmática de la Pontificia Universidad Gregoriana.
El ponente expuso la importancia de la dimensión comunitaria de la parroquia, una parroquia que se convierte en comunidad de comunidades. En este sentido, quiso dejar bien claro que «la parroquia no es una estructura caduca; precisamente porque tiene una gran
plasticidad, puede tomar formas muy diversas que requieren la docilidad y la creatividad misionera del pastor y de la comunidad».
Eso si, considera Vitali que para reformarse y adaptarse, la parroquia debe estar «en contacto con los hogares y con la vida del pueblo» y no se convierta en una «estructura separada de la gente o en un grupo de selectos que se miran a sí mismos». Además, «a través de todas sus actividades, la parroquia debe alentar y formar a sus miembros para que sean agentes de evangelización».
Por desgracia, el ponente piensa que «tenemos que reconocer que el llamado a la revisión y renovación de las parroquias todavía no ha dado suficientes frutos en orden a que estén todavía más cerca de la gente». Para conseguirlo, Vitali aboga por una «pastoral de conversión».
Señala que «la diócesis es una porción del Pueblo de Dios que se confía a un Obispo para que la apaciente con la cooperación del presbiterio». Dicho Obispo «es el gran sacerdote de su grey, de quien deriva y depende la vida de sus fieles en Cristo», pero como es imposible que el Obispo presida personalmente siempre y en todas partes, «debe por necesidad erigir diversas comunidades de fieles» entre las que sobresalen las parroquias «distribuidas localmente bajo un pastor que hace las veces del Obispo, ya que de alguna manera representan a la Iglesia
establecida en toda la tierra».
Por todo ello, Vitali es partidario de fomentar «teórica y prácticamente entre los fieles y el clero la vida litúrgica parroquial y su relación con el Obispo. Hay que trabajar para que florezca el sentido comunitario parroquial».