La celebración de la fiesta de San Vicente Ferrer en la Facultad de Teología llevó a la institución universitaria hasta la localidad valenciana de El Palmar. Los miembros de la comunidad académica, profesores y alumnos, así como el PAS (personal de administración y servicio) realizaron una peregrinación en aquella población que este año celebra el Jubileo por su Santísimo Cristo de la Salud.
Los dos autobuses de la expedición, en la que participaron unas 100 personas, partieron a las 10:30 desde las Torres dels Serrans de Valencia.
Poco después de las 11:00 de la mañana, y con todos los participantes ya en El Palmar, comenzó la peregrinación por las calles del pueblo. Al frente de la misma Gonzalo Albero, párroco de Niño Jesús del Huerto (parroquia de la población) y profesor de nuestra Facultad.
La peregrinación consistió «en un itinerario que nos lleva hacia Dios» como apuntó Albero, «y que tiene como lugares la confesión sacramental, la comunión eucarística y la oración por el Sumo Pontífice». Se desarrolló en cinco disposiciones jubilares y otras tantas paradas a lo largo del pueblo. La última de esas paradas fue en la plaza del pueblo, que dio paso a la entrada en la parroquia de el Niño Jesús del Huerto.
Allí se celebró una eucaristía que fue presidida por el Decano, Vicente Botella. Concelebraron varios sacerdotes, entre ellos el propio párroco Gonzalo Albero y el nuevo canónigo celador del Santo Cáliz, Juan Miguel Díaz Rodelas, que en su día también estuvo al cargo de aquella comunidad parroquial durante 7 años.
La celebración eucarística incluyó el momento en el que todos los peregrinos recibieron una cruz bendecida como muestra de su participación en este Año Santo Jubilar del Cristo de la Salud.
Tras la misa, los participantes que quisieron montaron en una de las barcas que recorren la Albufera y, en aquél paraje, renovaron las promesas bautismales. La bonita jornada acabó en un restaurante de la localidad valenciana en la que todos los peregrinos compartieron una comida de hermandad.