El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, destacó ayer en la presentación de la obra Vírgenes Coronadas Canónicamente en España que “el corazón de España es corazón mariano y la coronación de la Virgen es un signo de nuestro reconocimiento de su grandeza y con la coronación Dios corona, a través de la Iglesia, su propia obra”.
En la presentación, presidida por el Cardenal ayer tarde en la Facultad de Teología San Vicente Ferrer, intervino el obispo auxiliar de Valencia monseñor Arturo Ros quien subrayó el significado de la coronación para las comunidades cristianas “como gesto de intimidad y comunión con la madre de Jesús, por deseo de cercanía con Ella” e indicó que esta obra “motiva momentos de oración y devoción personal”.
Asimismo, monseñor Juan Miguel Ferrer, presidente de la Sociedad Mariológica Española y deán de la Catedral de Toledo y autor de gran parte de los textos, definió la obra como “un libro singular que es, a la vez, un signo dentro de una biblioteca, de un centro de estudio, una parroquia o un hogar cristiano ya que representa y evoca el valor de su contenido, que es la piedad y la fe mariana”.
Por su lado, Manuel Celada, editor de Edicel Cultura Católica, que ha publicado la obra, explicó que el libro muestra 627 imágenes de la Virgen María “de gran tamaño porque la idea es que el lector las vea y lea la historia, porque recoge las crónicas que describen todo lo que sucedió” en las Coronaciones Canónicas en España desde 1881 hasta el 24 de julio de 2018.
Además, agradeció la colaboración del sacerdote Andrés de Sales Ferri, director del Archivo de Religiosidad Popular del Arzobispado de Valencia, y del fotógrafo Manolo Guallart, que le ayudaron en la parte relativa a la diócesis de Valencia.
La obra, que completa una trilogía compuesta por otras dos anteriores dedicadas a Jesucristo y a los santos beatos mártires del siglo XX, contiene el prólogo de varios cardenales españoles: Antonio Cañizares, Arzobispo de Valencia; Ricardo Blázquez, Arzobispo de Valladolid; Carlos Osoro, Arzobispo de Madrid y Carlos Amigo, Arzobispo Emérito de Sevilla.